Bolas de patata rellenas de carne

Ingredientes para 4 personas

1 kg de patatas.
200 g de carne picada.
100 g de queso.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
6 cucharadas de tomate frito.
2 ó 3 huevos.
Pan rallado y harina.
Aceite, perejil y sal.

Preparacion

Lavamos bien las patatas y las ponemos en una cazuela cubiertas de agua.
Las cocemos aproximadamente durante 20 minutos desde el momento en que comience a hervir el agua.
El tiempo de cocción depende del tamaño y del tipo de patata utilizada, la mejor forma de comprobar que están tiernas es pincharlas con un palillo, si éste entra fácilmente están listas.

Retiramos el agua de cocción y pasamos las patatas por el pasapurés.
Batimos un huevo y se lo agregamos al puré de patata. Incorporamos también el perejil picado y removemos hasta obtener una mezcla homogénea.
Para dar forma a las bolas de patata es conveniente que la mezcla de huevo y puré resulte espesa. En primer lugar nos aseguramos de escurrir bien el agua de cocción antes de pasar las patatas por el pasapurés; lo siguiente será añadir el huevo batido poco a poco, comprobando a cada momento la consistencia de la mezcla, por si no fuese necesario añadir todo el huevo.

Pelamos los ajos y la cebolla y los picamos muy finitos.

Ponemos 3 cucharadas de aceite en una sartén a calentar a fuego medio.
Echamos el ajo, esperamos unos segundos y añadimos la cebolla. Los cocinamos hasta que la cebolla comience a dorarse, entre 5 y 8 minutos, removiendo con una cuchara de madera de vez en cuando.
Subimos el fuego e incorporamos la carne.
La salteamos 2 o 3 minutos; en cuanto pierda el color rojo apagamos el fuego.
Salpimentamos, añadimos 6 cucharadas de tomate frito, 1 cucharada de perejil picado, y lo dejamos enfriar.

Este paso es el más complicado de la receta, así que debemos hacerlo con paciencia y con mucho cuidado.
Hacemos bolas con el puré de patata, dando forma con las manos e intentando que tengan todas el mismo tamaño. A continuación, hacemos un agujero con el dedo e introducimos un dadito de queso y la carne picada. Las cerramos con cuidado.
Es importante que el puré de patatas haya reposado un tiempo para que adquiera la consistencia adecuada.

Pasamos las bolas de patata por harina, por huevo batido y finalmente las rebozamos en el pan rallado.
Freímos las bolas en una sartén con abundante aceite, a fuego fuerte, pero no al máximo para que se derrita bien el queso por dentro.
Finalmente, las escurrimos sobre un papel absorbente de cocina.