Mousse de limon

Publicado en por La cocina de mama y papa

Mousse de limon

Ingredientes:

- Limones, 2 medianos
- Huevos, 2 grandes
- Leche condensada, unos 160 gramos
- Gelatina, 3 láminas
- Azúcar, 2 cucharadas grandes
- Agua


Preparación:

Para empezar vamos a elegir los envases donde colocaremos nuestra mousse de limón, si será un único envase, o envases individuales de tamaño más pequeño. El origen de la exitosa mousse que todo el mundo ha probado alguna vez es del país francés, aunque ya es conocida en prácticamente todo el mundo. Hoy en día podemos mousse de todo tipo de sabores, desde la mousse de chocolate o la mousse de fresa hasta la que nos ocupa en esta receta. Los forraremos con papel de aluminio.

Quitaremos la piel del limón, importante que sea la parte amarilla, la blanca amarga bastante y no nos interesa este sabor. Una de las partes del limón que más nutrientes tiene es la piel y muchas veces nos deshacemos de ella sin aprovecharla. Has de saber que en la piel del limón hay una mayor cantidad de vitaminas que en el jugo, hasta diez veces más. La hervimos en un cazo con 50 ml de agua junto a un par de cucharadas de las pequeñas de azúcar. Lo hervimos unos 6-7 min. Con los limones sin piel, le sacamos el zumo exprimiéndolo.

A continuación vamos a coger las hojas de gelatina y diluirlas, para ello usaremos una sartén al que le echaremos un poco de agua y las hojas de gelatina dentro para que se vayan diluyendo. Podemos decir que la gelatina está formada prácticamente en su totalidad por proteínas, alrededor de un 85-90%, el resto es agua y sales minerales.

Usaremos un nuevo recipiente para poner el zumo que exprimimos antes y la leche condensada, lo batimos y después le añadimos la gelatina que ya antes hemos diluido. La mousse de limón no es un dulce que no se pueda permitir aunque esté realizando una dieta para bajar paso, con el ingrediente que hay que tener más cuidado es con la leche condensada. Este tipo de leche puede llegar a tener hasta 320 calorías por cada 100 gramos que consumamos, algo no demasiado recomendable a diario. Ahora procedemos a montar las claras de huevo a punto de nieve, cuando lo tengamos le añadimos los demás ingredientes y lo mezclamos con mucho cuidado y tranquilidad. Ahora ya tenemos nuestra mousse de limón preparada, solo nos queda repartirla en los envases que hayamos elegido y dejar que se enfríe en el frigorífico.

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